PSICOLOGÍA TELEMÁTICA
2.1 El punto de mira inicial de la Psicología Telemática sitúa en un primer plano a los interlocutores que interactúan en las redes telemáticas. Cabe distinguir entre personas y bases de datos, en torno a los cuales la psicología puede realizar determinadas contribuciones.
Los internautas son usuarios telemáticos que actúan y se desenvuelven con determinadas estrategias en su intento de arribar a destinos concretos o prolijos. Cabe distinguir entre internautas documentados e internautas indocumentados. La diferencia radica en la capacidad de resolver incidencias por cuenta propia, sin pedir ayuda externa.
Los internautas documentados tienen muchas horas de vuelo a sus espaldas; están resabiados. Como consecuencia son personas avezadas en el manejo de los soportes físicos y lógicos, en operar con los CD-ROM. Conocen la estructura técnica de la red, saben como gestionar los ficheros y discos efectuando las conversiones pertinentes, siguen pautas de búsqueda depuradas. Ya están generando publicaciones electrónicas que pueden consultarse dentro y fuera de la red, se mantienen al tanto de las tendencias de las nuevas tecnologías, tienen un dominio suficiente del inglés y además tienen a gala un cierto toque de escepticismo sobre lo que ocurre y se mueve por el ciberespacio {Prieto, 1997a}.
Los internautas indocumentados se incorporan a las redes telemáticas con muy poca experiencia informática a las espaldas y, a menudo, sin tener un manual de consulta a mano. Pertenecen a la cultura de la bienquerencia benevolente, esto es, "se hace lo que se puede", "ésto me desborda", "échame una mano, por favor". Se adentran con la mejor de las voluntades en pos de la bienandanza. Cometen multitud de errores, la mayoría nimios, dando por sentado que los restantes usuarios serán comprensivos. Inicialmente aparentan un ánimo timorato, que puede acentuarse o inhibirse, dependiendo de las muchas o pocas ayudas que encuentren en su ambiente. El viejo asunto de los refuerzos y las conductas que se incitan o se extinguen. Suelen sobrevivir quienes superan coyunturas de ansiedad y estrés recurriendo a la asertividad o a la dependencia.
Entre los internautas documentados la población masculina está suprarrepresentada, siendo muy activa generando y resolviendo incidencias. Entre los internautas indocumentados la población femenina está suprarrepresentada, siendo activa como usuaria básica e inhibiéndose, a menudo, cuando surgen las incidencias que requieren un abanico amplio de destrezas informáticas para resolverlas. Suelen complementarse una vez más varones y mujeres en este área ya que quienes son competentes en el lenguaje de los chips no suelen serlo en lenguas foráneas. Quienes han dedicado muchas horas al aprendizaje y dominio de lenguas foráneas no abordan con ánimo distendido el lenguaje de los chips. La psicología telemática puede ahondar en el estudio e indagación de las características y estrategias que contribuyen al éxito o al fracaso entre los internautas.
Las bases de datos pueden ser diseñadas o rediseñadas (y algunas están ya en esa vía) con el punto de mira puesto en la optimización de las interacciones que tienen lugar para hacerlas más asequibles o para facilitar el intercambio. En la fase actual, por ejemplo, se opera fundamentalmente recurriendo a operadores lógicos ideados por G. Bool en el siglo XIX; permiten efectuar búsquedas por categorías debidamente acotadas. Durante cinco décadas los psicólogos del trabajo, los psicólogos experimentales y los psicólogos cognitivos han contribuido al desarrollo de una especialidad, conocida como Psicoergonomía, dentro del ámbito más genérico de la Ergonomía (Leplat, 1985). El meollo de la contribución psicológica ha estado centrado en el análisis y seguimiento de los aciertos y errores humanos en las interacciones que ocurren en sistemas hombres-máquinas. Se han puesto en marcha, así, una amplia gama de acciones preventivas y correctivas. Atañen
- a los estudios de viabilidad,
- a la puesta en marcha de los programas con o sin demostración previa,
- a los procesos de validación del funcionamiento de la gama de variantes en el interfaz,
- a los procesos de producción, distribución y servicio postventa.
